Tras un año complejo por la guerra comercial desatada por el presidente Donald Trump, México perfila un 2026 con mayores retos por la incertidumbre arancelaria y la revisión del Tratado con Estados Unidos y Canadá (T-MEC), el principal foco de volatilidad del próximo año, según especialistas consultados este martes por EFE.
A nivel doméstico, el coordinador del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios (Lacen), José Ignacio Martínez, advirtió en una entrevista que la economía mexicana llega a 2026 con señales de debilidad en inversión y producción industrial, así como con indicadores de confianza que describen cautela en empresas y consumidores.
Martínez sostuvo que, aun con variables favorables como inflación, tipo de cambio y tasa de interés, el impacto sobre el consumo y la actividad sigue sin reflejar un repunte económico a nivel doméstico claro.
En su lectura, el primer semestre de 2026 estará marcado por la expectativa alrededor de la revisión del acuerdo, en un escenario donde Trump podría endurecer las presiones arancelarias como herramienta de negociación en varios frentes.
Ayer la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum también colocó el contexto global como un factor determinante del año en curso durante su habitual conferencia.Consultada aparte, Janneth Quiroz Zamora, directora de Análisis Económico, Cambiario y Bursátil en Monex, reconoció riesgos a la baja por aranceles e incertidumbre asociada al T-MEC, pero planteó un escenario base menos adverso.
La especialista estimó un crecimiento del PIB de 1.3 % en 2026, frente al 0.4 % previsto para 2025, apoyado por menores tasas de interés, por el derrame económico asociado al Mundial de Fútbol de la FIFA y por una posible ganancia de participación de mercado frente a China en América del Norte.
Por su parte, la directora de Análisis Económico y Financiero de Banco Base, Gabriela Siller, planteó que “2026 será un año con muchos retos económicos” y agregó el estancamiento económico y un posible repunte de la inflación.
No obstante, advirtió que el año podría resultar un tanto “engañoso”, ya que el Mundial de Fútbol puede generar un efecto de optimismo que distraiga de los problemas, así como por una sensación de que la economía va bien por la apreciación del peso y un crecimiento mayor al de 2025 —estimado por Base en 0.4 % para 2025 y de 0.8 % en 2026—, aunque no sea suficiente.
